El arte cotidiano.

Sonríele a la vida-Vidacrocanti.

Sonríele a la vida. Una tarde tenía que hacer una trabajo para la universidad a cerca de la metonimia. Había faltado a esa clase y no tenía ni idea de lo que se trataba. Maiky y Pacheco, unos amigos, vinieron a casa. Tenía que hacer unas fotos y redactar su significado para el trabajo y no tenía ni idea de por donde empezar. Mis dos amigos empezaron a decir todas las ideas que se pasaban por su cabeza y al final, después de miles de millones de ideas, salió la buena...

Sonríele a la vida. La primera es una sonrisa sana, limpia, feliz formada con vasos rellenos de leche. En cambio, la segunda son vasos rellenos de whisky que representa una vida insana, sucia, infeliz.

Los jóvenes y adolescentes buscamos divertirnos, pasarlo lo mejor posible y cuantas más locuras mejor. Sin embargo, no nos damos cuenta de las consecuencias que esto tiene. Creemos que así es la mejor manera de vivir, pero así no sonreímos a la vida.